Los empresarios que trabajan con productos vegetales pueden aprovechar sus desperdicios para producir energía.
La biomasa en general es una energía renovable que consiste en el aprovechamiento de recursos vegetales o animales de forma sostenible para producir energía.
Existen muchos tipos diferentes de biomasa y muchas formas posibles de aprovecharlo, pero lo principal que podemos destacar es que el empresario puede transformar los residuos orgánicos procedentes de sus propios procesos de fabricación revalorizándolos y conviertiéndolos en combustible con el que alimentar esos mismos procesos. El beneficio es doble, ya que por un lado, se liberan del gasto que supone deshacerse de los residuos; por otro, el combustible les sale gratis.
Existen ya muchos ejemplos de empresas que han utilizado este recurso.
Hay ganaderos que aprovechan los excrementos de su ganado para fermentarlos en contenedores herméticos y producir biogás con ellos. Posteriormente, utilizan este biogás para alimentar calderas de gas que generan la energía que necesitan para su actividad.
Algunos empresarios del vino y del aceite de oliva aprovechan los residuos procedentes de la poda de sus árboles y vides para alimentar calderas de biomasa que tienen el mismo objetivo: producir energía para su industria.
En Escocia, por ejemplo, Diageo, la empresa fabricante del conocido whiskey Johny Walker y del vodka Smirnoff, utiliza los residuos procedentes de la fabricación de sus licores. Separan los residuos sólidos y los residuos líquidos; los primeros se combustionan directamente, mientras que los segundos son fermentados para producir biogás. De esta forma, se producen el 98% de la energía térmica y el 80% de la electricidad que requiere la destilería.
En Valencia, la universidad ha desarrollado un método para el aprovechamiento de las cáscaras de naranjas. De cada dos toneladas de naranjas se produce una tonelada de residuo vegetal. De esta tonelada, y según este método, se pueden obtener hasta 500 litros de agua de riego, tres kg de aceite de esencia, 170 kg de pienso, y 40 litros de un biocombustible denominado etanol, es decir, alcohol que se puede utilizar para motores que funcionen con alcohol (hay que coches que lo hacen). No se puede pensar en mayor eficiencia energética y mayor beneficio económico de una tonelada de residuos vegetales...
Para quien no disponga de residuos orgánicos, existen otros tipos de aprovechamiento de la biomasa:
Por este motivo, es conveniente acercarse a cada empresa y analizar cuáles son sus necesidades y cuáles son sus circunstancias, porque siempre se podrá optimizar el uso de los recursos que esa empresa hace de los mismos. Soliclima le aconsejará.